Definición del Estrés

El término "estrés" se utilizó por primera vez por el endocrinólogo Hans Selye en la década de 1930 para identificar las respuestas fisiológicas en animales de laboratorio. Más tarde se amplió y popularizó el concepto para incluir a las percepciones y las respuestas de los seres humanos tratando de adaptarse a los desafíos de la vida cotidiana.

El estrés en determinadas circunstancias puede ser experimentado en forma positiva, como cuando es una respuesta adaptativa que impulsa a la activación de los recursos internos para atender retos y alcanzar metas.

Los signos de estrés pueden ser cognitivos, emocionales, físicos o de comportamiento e incluir (pero no están limitados a) los síntomas tales como: una perspectiva negativa, el exceso de preocupación, mal humor, irritabilidad, agitación, incapacidad para relajarse, sentirse abrumado, sensación de soledad o aislado, deprimido, achaques y dolores, diarrea o estreñimiento, náuseas, mareos, dolor de pecho, palpitaciones, comer demasiado o no lo suficiente, dormir demasiado o no lo suficiente, la dilación o descuidar las responsabilidades, el uso de alcohol, cigarrillos, o drogas para relajarse, y los hábitos nerviosos (por ejemplo, morderse las uñas).