Estrés en adolescentes

Como un ejemplo de estrés relacionado con la transición a una vida, la adolescencia suele provocar un aumento en la percepción del estrés como los adultos jóvenes aprenden a hacer frente a las crecientes demandas y presiones. Los estudios han demostrado que el exceso de estrés durante la adolescencia puede tener un impacto negativo sobre la salud física y mental más adelante en la vida. Por ejemplo, el estrés adolescente es un factor de riesgo para el desarrollo de la depresión, una enfermedad grave que conlleva un mayor riesgo de suicidio.

Afortunadamente, las eficaces estrategias de gestión del estrés pueden reducir los efectos nocivos del estrés. La presencia de las redes de apoyo social entre los amigos, familiares y otros grupos religiosos o afiliaciones puede ayudar a reducir la experiencia subjetiva de estrés durante la adolescencia. El reconocimiento del problema y ayudar a los adolescentes a desarrollar habilidades de gestión de estrés también pueden ser útiles como medidas preventivas. En casos graves, un médico u otro proveedor de atención médica pueden recomendar tratamientos o consejos que pueden reducir los riesgos a largo plazo de estrés adolescente.

¿CUÁL ES LA RESPUESTA AL ESTRÉS SALUDABLE?

Un aspecto clave de una buena respuesta de adaptación al estrés es el momento oportuno. Las respuestas deben ser iniciadas rápidamente, el mantenimiento de una adecuada cantidad de tiempo y, a continuación, tranquilidad para garantizar un óptimo resultado. Un exceso de respuesta a estrés o el fracaso para apagar una respuesta de estrés puede tener consecuencias negativas biológicas de un individuo. El humano sano tiene tres respuestas al estrés en tres componentes:
* El cerebro maneja (media) la respuesta inmediata. Esta respuesta indica la médula suprarrenal a la liberación de epinefrina y norepinefrina.
* El hipotálamo (una zona central en el cerebro) y la glándula pituitaria inician (de activación) la respuesta más lenta de mantenimiento de señalización por la corteza suprarrenal para la liberación de cortisol y otras hormonas.
* Muchos neurales (nerviosas) son los circuitos implicados en la respuesta de comportamiento. Esta respuesta aumenta la excitación (de alerta, el aumento de la conciencia), se centra la atención, inhibe la alimentación y el comportamiento reproductivo, reduce la percepción del dolor, y redirige el comportamiento.

Los resultados combinados de estos tres componentes de la respuesta al estrés para mantener el equilibrio interno (homeostasis), aumentar la producción de energía y la utilización, y alterar los electrolitos (elementos químicos) y el equilibrio de fluidos en el cuerpo. También preparan el organismo para una reacción rápida a través del sistema nervioso simpático (SNS). El SNS funciona mediante el aumento de la frecuencia cardiaca, aumento de la presión arterial, la reorientación del flujo de sangre al corazón, músculos, y lejos del cerebro y el tracto gastrointestinal, y la liberación de combustible (glucosa y ácidos grasos) para ayudar a luchar o huir del peligro.