Asma Prevención

Tabaquismo


Si eres un fumador y tienes asma, debes dejar de fumar. Esto reducirá significativamente la intensidad y la frecuencia de tus síntomas, ya que fumar también puede reducir la eficacia de la medicación para esta enfermedad.


Tu médico o farmacéutico, también podrán proveer ayuda y asesoramiento. Si no fumas y tienes asma, deberías evitar la exposición al humo de tabaco.


Vacunas


Debido al mayor riesgo de complicaciones, a las personas con asma grave se recomienda recibir las vacunas para la influenza (gripe) y neumococo (una bacteria que puede causar neumonía, meningitis e infección de la sangre).


Evita Factores Desencadenantes


Es importante que identifiques los desencadenantesdel asma. Algunos factores como la contaminación del aire, enfermedades virales y otras condiciones climáticas, pueden ser difíciles de evitar. Sin embargo, existen otros que sí puedes prevenir, como los ácaros del polvo, esporas de hongos o el pelo de las mascotas.


Peso, dieta y ejercicio


Mantener un peso saludable te ayudará a controlar el asma con mayor eficacia. La clave para mantener un peso saludable es tener una dieta saludable y ejercicio regular; un bajo contenido de grasa, alto contenido de fibra, incluida la abundancia de frutas y hortalizas frescas (cinco porciones al día) y granos enteros. Treinta minutos de ejercicio moderado al día, por lo menos cinco veces a la semana, también es recomendable. El ejercicio debe ser lo suficientemente vigoroso. Un buen ejemplo son las caminatas largas a paso lento.


Si tu asma es bien tratada, el ejercicio moderado no debería causar ningún problema. Sin embargo, consulta a tu médico si experimentas síntomas de asma durante o después de hacer ejercicio.


Salud General


Así como los factores descritos en la sección de causas, hay una serie de otras condiciones médicas, tales como rinitis y sinusitis, que se sabe que agravan el asma. Por lo tanto, si tienes síntomas de de asma y sabes que tienes estas condiciones, debes informar a tu médico. El tratamiento de la rinitis y sinusitis no necesariamente mejorarán el asma.


Rinitis


La rinitis es una inflamación de la mucosa de la nariz. Puede ser causada por una infección, como el resfriado común, o puede ser una respuesta a un alérgeno, como el polen. Los síntomas son estornudos, bloqueo, o mucosidad, picor en la garganta y los ojos.


Sinusitis


Sinusitis es una inflamación de las pequeñas cavidades de aire en el interior de las mejillas y la frente. Es causada por una infección. Los síntomas más comunes son un dolor palpitante que es peor cuando mueves la cabeza, una nariz bloqueada con mucosidad, y una alta temperatura.


Enfermedad por Reflujo Gastroesofágico


La enfermedad por reflujo gastroesofágico es una enfermedad del sistema digestivo donde se dan fugas de ácido desde el estómago al esófago (garganta). Los principales síntomas son la acidez, dolores de estómago, eructos y sensación de hinchazón.


Apnea del Sueño


La apnea del sueño es un trastorno del sueño en que la vía aérea superior en la garganta se colapsa en repetidas ocasiones, a intervalos irregulares, durante el sueño. Sin embargo, como tu sueño se ve perturbado deberías comenzar a experimentar los síntomas durante el día, y tu pareja puede presenciar un episodio de apnea del sueño, o señalar otros síntomas que ocurren durante la noche. Los síntomas incluyen ronquidos, la falta de concentración durante el día, y frecuentes despertares durante la noche.