Por lo general, la Pulmonía puede ser tratada en casa con antibióticos prescritos, pues la infección se da muy comúnmente por bacterias. Es posible que se presente una sensación de cansancio durante un par de días al terminar el tratamiento, pues el cuerpo aún sigue en recuperación. Pero es necesario llamar al médico si los síntomas no desaparecen. Esto puede deberse a factores como:

• Bacterias resistentes a los antibióticos. En estos casos, el médico deberá cambiar los medicamentos para terminar con el tratamiento de la pulmonía.
• Virus y no bacterias: Los antibióticos no tienen ningún efecto sobre los virus, por lo que si la causa de la pulmonía no es una bacteria, el cuerpo requerirá de otras alternativas para combatir la enfermedad.

Cuidados en Casa

Los siguientes consejos pueden ayudar a tratar los síntomas de la pulmonía:

• Tomar analgésicos, como el paracetamol o ibuprofeno para aliviar el dolor y reducir la fiebre.
• Tomar líquidos en abundancia para evitar la deshidratación.
• Descansar para ayudar al sistema inmunológico a combatir la enfermedad y lograr una recuperación total en menos tiempo.
• Dejar de fumar, pues el tabaco puede generar complicaciones.

Después del Tratamiento contra la Pulmonía

El médico deberá hacer una revisión general aproximadamente 6 semanas después de haber iniciado el tratamiento contra la pulmonía. En algunos casos, pueden organizar pruebas de seguimiento, tales como una radiografía de tórax. Casos en los que esto se recomienda son:

• Síntomas que no mejoran
• Síntomas que regresan
• Personas mayores de 50 años