Hipertiroidismo Introducción

HipertiroidismoEl Hipertiroidismo, también conocido como tirotoxicosis, o tiroides hiperactiva, es una condición que ocurre cuando hay demasiada hormona tiroidea en el cuerpo. La condición es más común en las mujeres que los hombres.

¿Cuál es la función de la glándula tiroides?

La glándula tiroides se encuentra en el cuello. Produce las hormonas que se liberan en el torrente sanguíneo para controlar el crecimiento del organismo y el metabolismo. Estas hormonas se llaman tiroxina y triyodotironina, y que afectan a procesos tales como la frecuencia cardiaca y la temperatura del cuerpo, y ayudan a convertir los alimentos en energía para mantener el cuerpo en marcha.

Normalmente, los niveles de triyodotironina y tiroxina en la sangre son controlados cuidadosamente a fin de que estos procesos se produzcan a una tasa estable. Sin embargo, en el hipertiroidismo, la glándula tiroides produce una cantidad en exceso de tiroxina, o tri-iodo-thyronine, que acelera el cuerpo del consumo de energía funciones. Como resultado de ello, el metabolismo es acelerado, lo que provoca síntomas tales como:

* Hiperactividad,
* Un aumento del apetito, y
* Súbita pérdida de peso, o ganancia.

Hipertiroidismo abierto y el subclínico

Hay varias causas de hipertiroidismo, aunque la más común es enfermedad de Graves-Basedow, en la que el objetivo del sistema inmunológico del cuerpo de la glándula tiroides y las causas para producir demasiada hormona tiroidea.

Tras ser diagnosticados, el hipertiroidismo puede clasificarse ya sea como:

* Abierto - lo que significa que causa síntomas, o
* Subclínica - cuando los niveles de hormona tiroidea están aún dentro de los límites normales.

Si no es controlada con éxito, el hipertiroidismo puede causar otros problemas de salud, tales como dysrhythmia en el corazón (ritmos irregulares del corazón), y la osteoporosis (huesos débiles y frágiles).

Si se deja sin tratamiento, el hipertiroidismo puede ser fatal. Sin embargo, la condición puede ser efectivamente tratada con medicamentos para frenar la producción de hormonas de la glándula tiroides, así como la radioterapia, y en algunos casos, la cirugía.